Tuve lunas más sangrientas,
esta está pintada,
indefensa, dormida,
en las tejas de mi casa.
Hoy puedo caminar enamorada,
segura en la noche
correr a la ventana,
bajarla a mi pupila
y ni una lágrima.
Tuve lunas derramadas
en mi almohada,
fluyendo por el piso,
líquidas, viscosas
puntiagudas,
tuve lunas hasta el alba.
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